Team Building para el IE

El sábado 10 de Octubre, de 10 a 17 horas, en las magnificas instalaciones de Golf Canal, Kaizen coaching y Team Building realizó su actividad de empresa en formato Team Building más masiva hasta la fecha, con un total de 770 participantes inscritos. El día comenzó frío, pero la previsión del tiempo auguraba un clima fantástico para una jornada de team building, como finalmente ocurriría, lo que participantes y staff técnico agradecerían enormemente.

A las 09:30 empezaron a llegar los primeros participantes, sus caras de sueño eran el reflejo de una larga noche propia de la media de edad, en torno a 28 años, de los participantes de la jornada de Team Building, basada en nuestras famosas miniolimpiadas, que para el IE se han denominado IMBA Unite. Los asistentes cursan un mba internacional, y los participantes, los propios estudiantes, acudieron en muchos casos acompañados de parejas e hijos, para los que teníamos preparados una zona infantil con talleres, circuito de karts y castillo inflable. Nuestros monitores les esperaban con la mejor de las sonrisas, y un sinfín de globos, pinturas y juguetes que harían las delicias de los mas pequeños.

El evento estaba programado de forma que compitieran las 3 convocatorias del año, Noviembre, con 7 secciones, Abril, con 4 secciones y Septiembre, con otras 7 secciones de unos 45 estudiantes por sección. De las 18 secciones, competirían por ser la sección con más puntos acumulados de todos los juegos, y además habría un premio especial para la sección que acudiera con el disfraz más original, ya que cada una de ellas iba a representar a una tribu, civilización o grupo organizado, ya fuera real o ficticio. Cada equipo acudió con un disfraz representativo, se podían ver decenas de minions, pitufos ó personajes de Disney desfilando junto a wallys, vikingos o corredores de san fermín, con toro incluido.

Las miniolimpiadas son la quintaesencia del origen de las jornadas de team building, hay que trabajar en equipo para optimizar el resultado, ya que de otra manera la coordinación y habilidades necesarias no se pueden alcanzar de forma individual. Así pues, trabajando en equipo comenzaron a afrontar la primera ronda de pruebas. Esta jornada de team building estaba compuesta de tres rondas, con cinco juegos o pruebas por ronda. En la primera ronda, la atención se centró en la carrera de sacos cooperativos, en la que hasta 6 participantes por cada saco tenían que tratar de llegar a la meta antes que los demás. ¿Cuestión de fuerza? No, de coordinación, la clave es saltar todos a la vez. Paralelamente, la carrera de esquís cooperativos sacaba lo mejor de los participantes, la coordinación tiene que ser casi perfecta para avanzar y no caer al suelo. Los jugadores de knee trembler, tenían que coger unas pelotas con las rodillas, sin ayuda de las manos, y transportarlas hasta unos aros al fondo de sus calles. Mientras, en apples race, por parejas y a la carretilla, tenían que coger unas manzanas con la boca, y transportarlas hasta el final de la calle. Sin duda esta fue la prueba más refrescante, ya que las manzanas estaban en un balde de agua. En la prueba de big groundhog, tendrían que correr agachados entre las piernas de sus compañeros, con mucha delicadeza, puesto que las prisas no son buenas. La jornada de team building iba cogiendo forma, y ya los primeros equipos se destacaban sobre el resto.

En la segunda ronda crazy relay tomó el protagonismo, carreras de buzos, de camareros, de sacos individuales o de carretillas hicieron las delicias de los participantes y acompañantes. En balloon race tenían que transportar el mayor número de globos posible, y en cookie relay lo mismo, pero había que comerse las galletas sin manos y dejándola caer desde la frente. Impresionante. Mientras, la carrera ciega ponía de manifiesto la confianza extrema que tiene que haber en los miembros del equipo, ya que la mitad de ellos llevaba un antifaz, y no podía ver absolutamente nada. Por último, en soap race se volvían locos para pasar las pastillas de jabón a sus compañeros, hacia atrás y sin mirar, complicado. Autentico trabajo en equipo, para una autentica jornada de team building.

En la tercera ronda, la prueba de puente móvil hacia que los participantes sacaran lo mejor de ellos mismos, no es nada fácil transportar a un compañero en volandas, simplemente con la ayuda de varios tablones. Conveyor belt desataba las carcajadas de todos, asistentes, staff y mirones, es una prueba divertidisima en la que tienen que transportar a un compañero mientras ruedan por el suelo, y además en el menor tiempo posible. En la carrera de aros, tenían que combinar la velocidad del equipo con el tacto de colocar los aros a la distancia correcta, para avanzar mucho pero minimizando el riesgo, ya que al mínimo error se arriesgaban a tener que empezar la prueba desde el principio. Y así, prueba a prueba, los participantes se desmelenaban, acudían a mirar la clasificación general y hacían cabalas acerca de cuantos puntos necesitaban aquí o allá, para poder subir peldaños en la clasificación general. La supremacía en la prueba de team building estaba en juego.

A la par de la competición, tanto los participantes como acompañantes, disfrutaban de fabulosas atracciones, como un toro mecánico, futbolín humano o wipe out, autentica prueba digna de humor amarillo. También se hicieron con el control del circuito de karts, haciendo de todo el recinto de golf canal su propio circuito particular, haciendo caso omiso a las instrucciones de los monitores, que se daban por vencidos ante el entusiasmo de los participantes.

Se sucedían las pruebas y el equipo de las Katrinas tomaba cierta ventaja, seguido de los wallys y los minions, que finalmente no pudieron darles alcance. Por lo tanto, las Katrinas se hicieron con el trofeo de ganadores del primer evento IMBA unite, basado en las miniolimpiadas team building de Kaizen coaching y team building. Una estupenda parrillada esperaba a todos los asistentes, con barra libre de refrescos, cervezas y sangría, que hicieron las delicias de todos los participantes. Ni que decir tiene que el apetito voraz de los jugadores hizo que las existencias de carnes y verduras volaran, menos mal que estaba previsto que tendrian que recuperar fuerzas después del desgaste generado.

Desde Kaizen coaching y team building queremos agradecer el gran trabajo de nuestro personal, la profesionalidad de Abania, el gran apoyo de Jorge de Golf canal y la fabulosa colaboración de Inés, Marta y Jana de IE, gracias a los cuales esta jornada de team building ha sido posible.