¿Qué ventajas ofrecen a los trabajadores y a la empresa las técnicas de motivación laboral? ¿Cómo motivar a nuestros empleados? Volvemos a retomar este tema una vez más. Y es que, en los tiempos que vivimos, un equipo motivado es sinónimo de eficacia y productividad, por lo que las empresas que realmente apuesten por ello, no han de perderlo de vista.

 

Algunas técnicas de motivación laboral

Precisamente, hace unas semanas, Unipresalud (compañía especializada en Prevención de Riesgos Laborales) publicaba un estudio que destacaba las cinco técnicas de motivación laboral más efectivas para conseguir trabajadores felices y más productivos. Veamos cuáles son:

1.- Horarios más flexibles. ¿A quién no le gustaría poder decidir su propio horario de trabajo o al menos un horario de entrada y salida más flexible, que poder organizar de forma personal? Está probado que contar con cierta flexibilidad en el horario supone otro punto importante a la hora de motivar a un equipo. Por ejemplo, entre las técnicas de motivación laboral que conocemos, ofrecer un cierto margen en los horarios de entrada y salida al trabajo hace que la presión se reduzca y que el trabajador pueda coordinar mejor sus horarios personales y familiares.

2.- Jugando en la oficina. Ya vimos en un post anterior cómo algunas empresas le daban a este punto una importancia capital, como era el caso de las instalaciones de las nuevas oficinas de Google en Zurich, con su flamante tobogán incluido para comunicar el área de trabajo con la cafetería… Apostar por el ocio en la empresa y emplear métodos de juego en escenarios que no son lúdicos no sólo fomenta la motivación del empleado, sino también el trabajo en equipo, la concentración, el esfuerzo, el compromiso… Es lo que inglés se conoce con el término inglés “gamification” (gamificación en castellano). Contar con un espacio de ocio para el descanso de los empleados e introducir objetivos y retos laborales enfocados desde el juego, hace que la jornada laboral se convierta en algo más ameno y más motivador.

Existen muchos métodos para integrar el juego dentro del entorno de trabajo y convertirlo en verdaderas técnicas de motivación laboral. Os proponemos un juego muy sencillo, que ayuda a la motivación y, de paso, a fomentar el trabajo en equipo y la relación entre los trabajadores. Es el clásico juego de encestar bolas de papel en la papelera. Consistiría básicamente en formar dos equipos, colocar una papelera en el suelo o en lo alto de una mesa y, por turnos, lanzar bolas de papel para tratar de encestarlas. El equipo ganador claro ésta que es quien más bolas de papel ha conseguido meter dentro de la papelera. Una buena opción para un momento de descanso en el trabajo o en la hora del almuerzo, o para esas situaciones tensas y de estrés general, para tratar de hacer un parón, romper con la negatividad y retomar la tarea tras unos minutos de descanso en equipo.

3.- La salud, otro aspecto fundamental. La empresa que se preocupa por la salud y el bienestar de sus empleados y sus equipos se percibe por éstos como un buen sitio en el que trabajar. Fomentar los hábitos saludables, contar con las instalaciones, mobiliario, equipos de trabajo, etc. adecuados para realizar cada una de las tareas sin que poner en riesgo la salud del empleado, ofrecerles programas específicos de salud… Todo ello cuenta también a la hora de conseguir un equipo feliz y motivado.

4.- Saber premiar los retos alcanzados. Otra de las claves de la motivación laboral. Está muy bien proponer objetivos a cumplir siempre y cuando sepamos cómo premiarlos correctamente una vez conseguidos. Y no necesariamente tienen que estar reconocidos económicamente. Días o tardes libres, nuevos beneficios de empresa… Hay muchas formas de premiar los objetivos cumplidos, lo importante es que el trabajador sepa que su esfuerzo ha merecido la pena.

5.- Trabajadores más independientes. Menos control para un mejor resultado. Muchas empresas parecen apostar por dar a sus empleados una mayor libertad a la hora de organizar sus tareas diarias, eliminando de esta forma ese estricto control de los superiores a los que muchos nos hemos visto sometidos frecuentemente. Se trata de establecer objetivos (semanales, mensuales, trimestrales, anuales…) y de dejar que el trabajador se convierta en un ser autónomo capaz de alcanzarlos por si mismo sin necesidad de una supervisión y un reporte constante. En algunos sectores, esto también estaría relacionado con el teletrabajo, es decir, la posibilidad de realizar parte de las tareas cotidianas desde el propio hogar del empleado, conectado a la empresa a través de Internet. Por supuesto, esto exige trabajadores responsables y comprometidos tanto con su calendario y programación de sus tareas como con la empresa en general.

6.- Planes de incentivos y team building, fundamentales. Y a las cinco técnicas de motivación laboral que propone Unipresalud, nosotros añadimos un último punto (que podría estar además relacionado con le punto 4) y que consideramos esencial: la necesidad de desarrollar un plan de incentivos y varias actividades de empresa o eventos de team building a los largo del año para los empleados. La recomendación es siempre acudir a un profesionales para poder diseñar cada actividad de acuerdo a una necesidad concreta: cohesión del equipo, comunicación, incentivo o premio por objetivos cumplidos, etc.

Lo importante, en cualquier caso, es saber ver y valorar la importancia de contar tanto con un equipo motivado, fuerte y unido, como con trabajadores felices y motivados también a nivel individual. Cuando esto último flaquea, se pone en peligro lo primero, sin duda.